jueves, 16 de mayo de 2013

Me es muy grato presentar el trabajo de María del Rocío González Lara, quien comparte una propuesta educativa en función de su interés por participar en el cambio del México que le ha tocado vivir:

DESARROLLO DE TALENTOS


Actualmente México ha enfrentado un problema en cuanto a educación, y pareciera que sobre este tema ya no hay más que decir: que los maestros no cumplen con sus horarios, que el gobierno destina demasiado dinero a la educación, que las familias no tienen suficientes posibilidades económicas, etc. Realmente no tengo mucha experiencia en el tema; no sé exactamente qué otras alternativas, que no sea hacer paros estatales, pueda proponer al gobierno para que esto cambie; pero tengo algo que sí podemos hacer todos para implementar una mejor educación y creación de interés en la escuela: aprender a desarrollar un talento.
De acuerdo con Alejandro Ramírez Magaña, director general de Cinépolis, en el país los jóvenes no tienen modelos a seguir y hay poca detección de talento en etapa temprana. Es por esta situación que decidí hacer un ensayo que tratará de tocar este tema y proponer acciones.
Para empezar, definiremos lo que es un talento: un talento es la capacidad que tenemos todos para desempeñar una determinada actividad. Esta actividad puede ser desde la más simple, como barrer bien un piso, hasta hacer alguna animación digital en una computadora.
Los talentos suelen estar asociados a las habilidades que traemos desde niños; hay personas que desde que son pequeñas ya están caracterizadas por ser muy buenos en determinadas cosas. Pero no sólo los talentos y habilidades que ya traemos desde niños son con los que ya nos quedamos toda nuestra vida, sino que también podemos desarrollar un talento, aunque la gente nunca se hubiera imaginado que éramos buenos para eso. Hay una sustancia microscópica llamada mielina, la cual es una capa aislante que envuelve los circuitos de fibras nerviosas que forman las neuronas. Ésta aumenta la fuerza, la velocidad y la precisión de las señales que mandan las neuronas. Cuanto más activamos un circuito determinado, mayor es la cantidad de mielina que optimiza ese circuito, de modo que nuestros movimientos y pensamientos se vuelven más fuertes, rápidos y precisos. Esta sustancia es la clave para desarrollar el talento que buscamos.
¿Por qué insisto mucho en desarrollar un talento? Porque en el momento en que, sobre todo un niño, descubre de los que es capaz, no tan fácilmente desistirá por tener un buen desempeño a lo largo de su vida, porque ya tiene una motivación por la cual luchar y salir adelante y sabrá que será bueno en todo lo que se proponga.
El talento agrega significado a nuestra vida, hace la diferencia en los demás, a la vez que inspiramos. Nuestra autoestima aumenta porque nos damos cuenta del gran poder que hay en cada uno de nosotros. Hay personas que tienen un pensamiento negativo sobre sus capacidades, pero no se dan cuenta que tienen mucho potencial. Todos tenemos la capacidad para realizar algo diferente. Si las desarrollamos y las ponemos al servicio de los demás, tendremos las bases para crear un nuevo estilo de vida y cambiar la de los demás.
Lo primero que debemos hacer es pensar en qué actividad nos haría felices, qué le da sentido a nuestra vida. Hay que hacernos preguntas como: ¿qué seguiría haciendo aunque no me pagaran?, ¿qué cosa lamentaría al final de mi vida no haber intentado?, ¿sobre qué tema me pasaría horas y horas hablando porque me encanta?, ¿en qué actividades pierdo la noción del tiempo? Ese tipo de preguntas debemos respondernos para empezar en el desarrollo de un nuevo talento.
Después viene la pregunta de ¿cómo lo desarrollaremos? Mediante práctica intensa. Debemos buscar a las personas y los lugares que nos puedan brindar un apoyo y nos den motivación para lograr ese talento que buscamos. Hay que tomar en cuenta que vamos a fallar en el intento, pero lo importante no es conseguir hacer una actividad a la primera, sino ser perseverantes y lograr nuestro propósito.
Si a los niños, desde temprana edad, les ayudaran a desarrollar sus talentos, la situación en la educación en México sería diferente, porque sus actividades no serían mecanizadas, sino que encontrarían un sentido a su vida por la cual seguir preparándose.
Termino con una frase que me gustó mucho de un libro de David Fishman (creador y fundador de la Universidad Peruana Ciencias Aplicadas) mencionada en su libro El espejo del líder, la cual me pareció muy motivadora para todo el que lea esto: "Cuando estás inspirado por un gran propósito, un proyecto extraordinario, todos tus pensamientos rompen sus ataduras, tu mente trasciende sus propias limitaciones, tu consciencia se expande en todas sus direcciones y te encuentras a ti mismo en un mundo maravilloso; fuerzas dormidas, facultades y talentos reviven y te descubres a ti mismo, como una persona mejor en la que un día soñaste."

Bibliografía:
Dávila, M. (2012) Problemas de la educación en México. Recuperado de http://ibero909.fm/problemas-de-la-educacion-en-mexico/